La Importancia de Saber Nadar
Garantía de supervivencia en momentos y lugares de alto riesgo
Aunque la gestación del ser humano se realiza en un medio acuático, la realidad es que hombres y mujeres no nacemos con la habilidad de nadar. El dominio de esta actividad requiere de un proceso de aprendizaje estructurado y bien planeado. Pero, ¿en qué nos beneficia saber nadar más allá de la práctica deportiva?
Seguridad Personal
La razón más importante por la que todas las personas deben aprender a nadar, es la seguridad personal. A lo largo de nuestra vida todos estaremos expuestos, por diversas razones, a experiencias alrededor de medios acuáticos. Sean éstas desde unas vacaciones en la playa, algún centro vacacional, en algún barco, crucero, pescando o simplemente descansando alrededor de una piscina con amigos.
Si la profundidad del agua del lugar es mayor a la estatura de las personas, tener la habilidad para flotar y nadar, hará la diferencia en términos de seguridad y sobrevivencia personal.
Riesgos de ahogamiento
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), los ahogamientos son la tercera causa de muerte a nivel mundial. La misma organización estima que cada año mueren por esta misma causa alrededor de 360,000 personas. El riesgo de ahogamiento es mayor en niños, varones y personas con fácil acceso al agua.
En 48 de los 85 países cuyos datos satisfacen los criterios para ser tenidos en cuenta en la misma investigación de la OMS, el ahogamiento representó una de las 5 primeras causas de mortalidad entre chicos de 1 a 14 años de edad.
El fácil acceso al agua y las inundaciones catastróficas de los últimos años, cuya frecuencia según se prevé irá en aumento, han complicado este panorama.
Prevención
De acuerdo con la investigación de la OMS, hay muchas medidas que son útiles para prevenir los ahogamientos, tales como la delimitación de las zonas de riesgo, la instalación de sistemas escolares y comunitarios para la prevención de ahogamientos, etc. Sin embargo, una de las formas más seguras de prevención es la de adquirir la habilidad de nadar.
Si bien, saber nadar no garantiza al 100% la supervivencia de las personas, si proporciona un porcentaje alto de mantenerse con vida en momentos de catástrofes o situaciones de riesgo. Si tú sabes nadar, podrías salvar tu propia vida o tener la oportunidad de rescatar a alguien cercano a ti.